sábado, 6 de febrero de 2010

flor de amiga

Una semana antes de navidad les pedimos a los niños del hospital que le escriban una carta al “Bolipapa”, el Papa Noel de Bolaroja, un personaje que inventamos para que les regale todo lo que quieran en ese día.
Les contamos que el Bolipapa es el papa noel de los Doctores Bolaroja que nos trae regalos a nosotros y como ellos son nuestros amigos, también les pueden traer regalos si le mandan una cartita diciendo qué es lo que desean...

En esa semana llegué a gastroenterología y me encontré con Delia, una niña que acababa de ser internada, tenía los ojos muy amarillos por lo avanzado de su enfermedad, pero no era el color lo que inquietaba, era ver esa mirada tan fría, dura, rara en una niña de 10 años.
Me acerqué y le pregunté si sabía quien era el Bolipapa y muy seria me dijo que no sabía ni quería saber, que no le interesaba lo que yo quería contarle. Los otros niños del cuarto si querían saber así que a ellos les conté, pero pude ver que ella también escuchaba. Cuando los demás terminaron de escribir sus cartas me volví a acercar a Delia, vamos a hacer tu carta le dije, qué quieres por navidad? Y me dijo que quería chocolate, panetón y largarse de ese lugar, estaba muy molesta. Y yo escribía todo lo que ella decía. Le pregunté si podía comer todo eso que estaba pidiendo y levantando la voz me dijo que ella podía comer lo que le diera la gana.
Y yo, con la sonrisa acompañando la situación escribo eso también… tráele lo que le da la gana… y qué mas? Una cocina, me dice, yo escribo y ropa para mi barbie y le digo ropa de fiesta, ropa de playa , ropa de paseo y piensa con el entrecejo marcado... ropa de fiesta y nada más.
Terminamos a duras penas la carta. Y le digo: “Delia, sabes qué te puedo regalar yo?”
Yo tenía una florcita pintada en la frente y tenía conmigo mis pinturas. Le ofrezco pintarle una flor como la mía y me dice no. No quiero nada de ti. No quiero ser igual que nadie, no quiero ser igual a ti, no quiero una flor en la frente como tú.
Y entonces viene una idea, Delia y si te la hago en el pie? Le cuento que he venido desde mi casa caminando por la playa y luego por la avenida Brasil y en el camino vine muy atenta y no he visto ni una sola persona con una flor en el pie. Y entonces lo piensa y finalmente acepta, escoge los colores y luego le hago otra en la mano, ella escoge los colores otra vez, se deja hacer y me mira mientras la pinto. Ya estaba un poquito más tranquila. Me despedí de ella , le dije que iba a estar cerca por si necesitaba algo y seguí haciendo cartas con los otros niños. Al rato se me acerca una enfermera y me dice que Delia me llama.
Doctora Wendy, quiero una flor en la frente, me dice. De qué color? le pregunto. Y me dice: los mismos colores de tu flor.
Y le pinté una flor exactamente igual a la mía… al terminar le dije a Delia que sólo las mejores amigas tienen flores iguales, que ahora teníamos que ser mejores amigas, le pregunté si estaba de acuerdo y me dijo que si. Le pregunté si podía contarles a mis amigos que éramos mejores amigas y aceptó. Así que fui corriendo a llamar a los Doctores Bolaroja que me acompañaban ese día para contarles la gran noticia. Ellos vinieron y me felicitaron por haber conseguido una mejor amiga tan linda.
Al día siguiente fui al hospital otra vez y al salir del ascensor oigo un grito: doctora wendy!!! Y era ella, en su silla de ruedas junto a su mamá y me llama y llama a la enfermera para contarle que éramos mejores amigas, me pidió que le volviera a pintar una flor, nos tomamos fotos… fue un día maravilloso.
El día de navidad yo estaba muy ansiosa por llegar a su cuarto, teníamos todo lo que había pedido, quería ver su carita cuando viera su cocina con ollas, platos, tazas, sartenes y la barbie con sus vestidos de fiesta... pero ella no pudo ver nada. Estaba inconciente, su mamá lloraba a su lado, cuando me vio me dio un fuerte abrazo, el doctor le acababa de decir que su niña se le iba, me acerqué a Delia, le hablé, le canté una canción sobre las mejores amigas que me inventé en ese momento y sus ojitos seguían cerrados.
Su mamá me agradeció y yo no entendía porqué me agradecía si yo no podía hacer nada por ayudarla.
Luego me dijo que toda la semana Delia había estado muy contenta porque tenía una mejor amiga, que les contaba a todos y que ya no estaba molesta, ni amarga, que la rabia se le había ido...
Delia se fue antes de año nuevo.
Pasé varios días muy movida, lloré mucho, me hice muchas preguntas y al final me sentí bendecida por haber tenido la oportunidad de conocerla, por haber visto su sonrisa y saber que ella, esté donde esté ahora, tiene una mejor amiga que no la olvida.


12 comentarios:

Samantha H. dijo...

mis ojos se pusieron muy llorositos... tus historias me encantan Wendy!

Gissele dijo...

Eres una hermosa persona!, te lo he dicho muchas veces, es sólo que este relato sobre tu preciosa amiga me hace pensar en esa facultad de tu corazón para extenderse hasta el infinito, para abrir dulcemente con la llave del amor genuino las puertas del corazón de seres igualmente hermosos y a veces temerosos de aceptar lo mejor en la vida por no saber cuánto les va a durar o porque simplemente a algunos se la pusieron tan confusa que les cuesta reconocer el amor de verdad. Qué bueno que Delia te encontró en su camino y aceptó dejarse "pintar" por tu cariño y qué bueno que pudiste conocerla y la dejaste tocar esa fibra dulce que ahora reverbera en tu alma. Estoy segura que recibió los regalos de Navidad más hermosos que niña alguna, tu amistad, su alegría recuperada y ... del resto, de su bolsita roja atada con tanto cuidado, su "otro" ángel se habrá encargado, éso es seguro! Te quiero muchooo, Wen, me has enseñado taaantooo Sólo Siendo Tú!

Fellini dijo...

Gracias Wen, por compartir eso. Te quiero!

Dreampicker dijo...

¿Ya ves? Cuando escribes desde el corazón, no puede haber lugares comunes, ni error. Me has conmovido. No dejes de escribir.

Poly y sus peludos dijo...

Esta fue la historia mas bonita que lei en la web de Bolaroja, realmente tierna! Admiro tu capacidad de entrega y que te dediques a lo que mas te gusta, hacer feliz al resto. Sigue adelante Wendy, que necesitamos muchas como tu para salir adelante!

CIN dijo...

qué suerte tenemos todos de tenerte a ti!!!!!! te quierooooooo!!!!

Anónimo dijo...

Querida Wendy:me conmueves con tus vivencias.no sabes lo feliz que haces a la gente.Muchas gracias por todo.Un fuerte abrazo.Sonia

S.S dijo...

solo te dire que me emociono demasido ese texto , fue inevitable que las lagrimas salgan... a veces (muchas) solo necesitamos que alguien nos muestre desinteresadamente una sonrrisa un abrazo unas palabras ella fue feliz con eso que le diste.

M. dijo...

ayy casi me haces llorar :/

Unknown dijo...

Dios te bendiga por el don que te regalo y que lo compartes con todos nosotros...

Anónimo dijo...

Ojalá y todas las Delias del mundo pudieran tener a su mejor amiga Wendy!

Rosa dijo...

Gracias Wendy y que Dios te bendiga siempre, me hizo llorar tu relato.